sábado, 24 de mayo de 2014

SE LOS GUARDO PARA EL FINAL

  Nadie lo quería. Nadie lo quería porque el tipo no hacia una, no se entendía ni porque ni para que lo habían traído si delanteros sobraban, ¿quien pidió traer a este tipo? La gente lo banco solo dos partidos, porque los hinchas son así, dos goles que te erraste y ya esta, te condenaron de por vida, encima este tipo era delantero, porque si sos mediocampista zafas un par de partidos mas, pero siendo delantero no, porque estas obligado a meterla entre los tres palos.
  El primer partido la gente lo banca porque apenas erra un gol fácil, se escuchan excusas como "hay que entenderlo, es la primera vez que se pone esta camiseta" y los otros hinchas asienten casi por obligación , al segundo partido, algún hincha mas paciente que el resto, larga una frase como "es difícil jugar en esta cancha" por que el tipo sigue errando goles insólitos.
  Ya en el tercer partido no lo banca nadie, la gente lo putea toda la semana, y cuando llega el domingo, es unánime el silbido para ese cristiano, que es el mas alto del equipo y sin embargo no sabe cabecear, pero el morocho no parece notar esa bronca que le tienen los 45 mil hinchas que están en la cancha y la otra multitud que lo ve por la tele. Encima el tipo cayo en el peor momento del club, por que el club había descendido hace dos años, y este era el tercer año que jugaba en esa divisional que le era totalmente ajena. Entonces, encima que el chabón era malo, el equipo no podía conseguir el ascenso, la gente no se bancaba mucho a nadie, y menos a este que jugaba con "el balde en la cabeza", ya empezaban las sospechas de que el tipo era pariente de alguien porque sino no podía ser que el técnico lo siguiera poniendo.
  El tema es que el equipo iba primero, faltaba poco para que terminara el campeonato y conseguir el tan esperado y justo ascenso que durante el otro par de años le había sido esquivo. faltaban cinco partidos pero el equipo podía cumplir su objetivo esa fecha, que se jugaba de visitante y para colmo en Jujuy, pero aunque los hinchas se tuvieran que comer mas de diez horas en micro iban a estar ahí, para ver a su querido club, si estos hinchas estaban tan enamorados de su equipo que copaban siempre, como no iban a estar ese día.
  Empieza el partido, la mitad del estadio para los locales (con varios espacios vacíos) y la otra mitad, para los visitantes, rebalsaba esa tribuna, no solo de gente sino que también de esperanza, alegría, bombos, banderas y por supuesto el cantico desde el corazón. Bueno, como decía, empieza el partido, el tipo perdidisimo en la cancha (como siempre) veía pasar a sus compañeros pasar y hacer un gol, estalla la tribuna visitante, "el gol del ascenso" ya exclamaba el relator, pero en ese momento paso lo peor que te puede pasar cuando estas gritando un gol, que veas al línea con la banderita levantada y LA PUTA QUE LO PARIO, tres minutos mas y termino el primer tiempo.
  Ya en el segundo tiempo en los primeros minutos hay un córner para el equipo donde jugaba el morocho, un centro alto, donde nadie puede llegar a esa pelota, se eleva en cámara lenta ese jugador tan criticado por todos, impacta la pelota con la cabeza y la manda a guardar, semejante locura desato ese gol que ya brotaban las lagrimas de algunos en las tribunas, el morocho pelo un grito desde el alma, estaban a media hora del ascenso, a un paso de devolver al equipo a la primera división, donde pertenecía. Pero la historia no termina acá, porque cuatro minutos después de este golazo, el lateral izquierdo del equipo visitante se escapa de su marca con pelota dominada, entra al área y mete un pase al punto de penal donde aparece el menos pensado, otra vez este jugador y devuelta la deja mansa en la red del arco rival, era la tarde/noche soñada por todos, 2 a 0   faltando 25 minutos, ya nada ni nadie paraba al equipo que estaba indomable y ahora si, lagrimas de la mayoría, esas lagrimas que brotan de los ojos porque ya la sonrisa no puede ser mas grande, pero esa emoción no solo se veía en los rostros de los hinchas, sino que también en el de este jugador, que lloraba como un niño. Pero increíblemente y afortunadamente esto no terminaba acá, porque en los minutos que faltaban para terminar esta gloriosa locura, este tipo recibe la bocha en el costado derecho, afuera del área grande, se desplaza dos metros con la pelota (todavía con lagrimas en los ojos)  y patea, ¿este muchacho se volvió loco? ¿piensa que de ahí la va a meter? no lo se, pero lo cierto es que le pelota entro, y no entro así nomas, se clavo en el ángulo del segundo palo, el gol de su carrera! el partido de su carrera!.
  Llego el pitido final, tan esperado por todos, el tan merecido ascenso había llegado y de la mano del mas criticado, del que mas de una vez todos los hinchas lo hubiesen sacado del equipo, festejos en todos lados.
  Lo ultimo que me queda decir es que al otro partido, ya con el objetivo consumado, la cancha llena como siempre, y miles de banderas, pero estas banderas eran inéditas, nunca vistas, estaban hechas por los hinchas, (si hay algo que tienen todos los hinchas de futbol, es que son bipolares, bah, somos bipolares) las banderas llevaban un mensaje que decía "PERDON TOLEDO".